Algunas personas quieren que cambiemos. Ocurre con cierta frecuencia en las parejas. Alguien nos atrae y empezamos una relación con el deseo de que cambie aquellas cosas que no nos gustan. Hay quien tiene la terrible manía de pretender cambiarnos, moldearnos, hacernos a su medida, cuando por suerte o por desgracia, los verdaderos cambios nacen únicamente del interior.
